Bolivia, aún sin DT, dice que Grupo A es difícil pero no imposible

El Grupo A de la Copa América de Chile-2015, integrado por Bolivia, Ecuador, México y el combinado local, "es difícil, pero no imposible", dijo hoy a medios locales el capitán boliviano, Ronald Raldes.

"El grupo es duro, como los otros, así que hay que prepararse bien, hay tiempo, y ojalá que podamos prepararnos mucho mejor", planteó Raldes que, sin embargo, advirtió que "todas las selecciones (del Grupo A) tienen más ventaja que nosotros (porque) son tres selecciones mundialistas", señaló.

Bolivia, que no clasifica a un Mundial desde EEUU-1994, no tiene aún técnico titular y para su último fogueo ante Venezuela, la semana pasada en La Paz, nombró de emergencia al argentino Néstor Clausen.

Esta indefinición hizo que el entrenador de Oriente Petrolero, Eduardo Villegas, haga votos para que "se nombre de una vez por todas al técnico, se planifique el trabajo" y se jueguen partidos internacionales de fogueo.

Villegas, que se rehusó a ser designado interinamente al frente del seleccionado, urgió a comenzar a trabajar "cuanto antes, mejor".

Tras la negativa de Villegas, la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) se inclinó por designar a Mauricio Soria, pero un incidente racista en el que estuvo involucrado lo descartó imprevistamente.

El último seleccionador titular de Bolivia, el español Xabier Azkargorta, que actualmente dirige a Bolívar, también consideró que el A "es un grupo duro".

"Todos conocemos el potencial de México y Chile es anfitriona y está con una presión enorme (para) ser campeón. Ecuador es un equipo mundialista que en los últimos años, tanto a nivel de clubes y de selección, ha crecido muchísimo", agregó.

El presidente de la FBF, Carlos Chávez, comentó -citado por un diario de La Paz- que "el sorteo me deja una buena sensación".

Comentaristas locales consideran que el Grupo A, a pesar de albergar a equipos fuertes, puede ser accesible para Bolivia, campeona de la Copa América como local en 1963 y finalista, también como anfitriona, en 1997.