El Tigre postergó la celebración celeste

The Strongest postergó la vuelta olímpica de Bolívar, al ganarle anoche el clásico 196 de la Liga por 1-0, en partido que se jugó en el estadio Hernando Siles. Alejandro Chumacero convirtió el único gol, que le permite a los atigrados sumar tres unidades, que lo mantienen en la pelea por conseguir el premio a la Copa Libertadores de 2016.

Los celestes perdieron en La Paz después de más de un año y el Tigre volvió a ser su verdugo, como la última vez que había caído el equipo de Azkargorta en Miraflores.

Obligado a sacar las tres unidades en juego, el Tigre mostró un juego más claro en los primeros 45 minutos y sólo le falto estar más fino para concretar las opciones de gol que creo sobre la portería de Rómel Quiñónez.

El compromiso comenzó muy tensionado. El juego fuerte se impuso en los primeros diez minutos, en el que el juez Alejandro Mancilla fue muy contemplativo con varios jugadores, a los que debió amonestar con el cartón amarillo.

Ni siquiera se había cumplido un minuto de juego y Germán Centurión y Gerardo Yecerotte se dieron de golpes a vista y paciencia de Mancilla. No fue lo único: Damir Miranda tuvo un fuerte ingreso sobre Raúl Castro y Luis Gutiérrez sobre Alejandro Chumacero.

Pero cuando pasó el juego fuerte, el que administró mejor el balón fue el conjunto atigrado. Ahí fue clave la tarea de Chumacero, que siempre buscó jugar por el piso con Pablo Escobar y Rodrigo Ramallo. De esta forma llegaron con peligro sobre el arco celeste, que sólo apeló al contragolpe para intentar sorprender a la defensa de su clásico rival.

Los últimos cinco minutos el Tigre intento irse al descanso con ventaja en el marcador y pudo hacerlo con un tiro libre de Escobar que pasó cerca del pórtico de Quiñónez.


En el segundo tiempo Bolívar arrinconó a su rival desde el primer minuto, los celestes ingresaron decididos a resolver el compromiso a su favor y Jhasmani Campos estuvo a punto de conseguir su objetivo con un tiro libre sobre los dos minutos de juego. Seguía siendo incisivo la Academia, mientras que los aurinegros retrocedieron y apostaban al contragolpe.

El gol atigrado llegó a los 13 minutos con una gran jugada de Ramallo, que se llevó la marca de los defensores rivales, cedió para Escobar, que sacó un remate que pegó en el poste izquierdo de Quiñónez y del rebote Chumacero atropelló para lograr el tanto.

El gol le cayó como un balde de agua fría a Bolívar, que no tuvo reacción en la cancha, todo lo bueno que había mostrado hasta ese momento se vino para abajo y por el contrario el Tigre se envalentonó.

En Bolívar ingresaron Juan Carlos Arce y José Capdevila, pero el tiempo comenzó a ser el gran enemigo de los celestes, que después de más de un año volvían a perder en La Paz.

Una jugada de lujo de Capdevila, una rabona, fue salvada por Vaca a los 37', pero la atajada de la noche fue el cabezazo que le sacó a Yecerotte con la punta de los dedos, a los 41', ahí terminaron las chances celestes que deberán esperar el domingo para ver si logran al título. Por el momento el Tigre le dijo no a sus pretensiones.