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Dos semifinales con alma de final

Brasil-Alemania y Argentina-Holanda: las semifinales del Mundial de fútbol tienen alma de final. De hecho, ya lo fueron en el pasado, así que pocos se atreven a pronosticar quiénes disputarán el título el 13 de julio en el estadio Maracaná.
Las estadísticas dicen que los sudamericanos ganarán el duelo, pero los europeos llegan algo más enteros y con un juego más convincente a la ronda de los cuatro últimos.
"Todos están jugando con pasión. Todos quieren ganar", aseguró el exfutbolista alemán Lothar Matthäus, campeón Mundial en 1990.
Nunca un equipo del Viejo Continente fue capaz de levantar una Copa del Mundo en América. En las siete ocasiones en las que el torneo se celebró al oeste del océano Atlántico, el título se quedó "en casa": tres veces para Brasil, dos para Argentina y dos para Uruguay.
El balance de enfrentamientos en rondas eliminatorias en la historia de los mundiales se decanta ligeramente del lado de los sudamericanos, que se impusieron en 34 de los 61 duelos. Sin embargo, la estadística es demoledora cuando se trata de torneos jugados en el subcontinente: nueve derrotas europeas en nueve partidos.
"Los equipos sudamericanos tienen ventaja al jugar en casa. Eso no se discute. Conocen el entorno, están acostumbrados", admitió el seleccionador alemán, Joachim Löw.
Sin embargo, Alemania alcanzó las semifinales del Mundial por cuarta vez consecutiva y lo hizo exponiendo su mejor fútbol en cuartos ante Francia, a la que ganó por 1-0.
El equipo germano es un grupo consolidado, con años de trabajo en común y con la necesidad de lograr un título que avale a toda una generación de futbolistas. (DPA)

Ocho manos para atrapar una Copa
Tras 60 partidos con grandes actuaciones de arqueros, sólo quedan ocho manos en la defensa del sueño de levantar la copa en Brasil.
El estadounidense Tim Howard, el mexicano Guillermo Ochoa y el costarricense Keylor Navas brillaron en el Mundial, pero los nombres ahora son otros: Manuel Neuer (Alemania), Julio César (Brasil), Sergio Romero (Argentina) y Jasper Cillessen (Holanda).
Los cuatro tienen características, trayectorias e incluso actualidades diferentes, aunque también algunos puntos en común.
Por ejemplo, tres de los cuatro -Neuer es la excepción- llegaron al torneo en medio de la sospecha y el debate, apenas sostenidos por sus entrenadores.
"Julio César estará en la Copa aunque no juegue en ningún equipo", afirmó varios meses antes de la convocatoria Luiz Felipe Scolari.
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